sábado, 25 de abril de 2015

Refinamiento para rato

Bienvenidos una semana más a El drama de mi ortodoncia. ¿Qué tal vuestros dientes? Antes de nada me disculpo por el abandono de mis aventuras con Invisalign, pero llevo semanas desolada y sin fuerzas para hablar del tema.
Concretamente lo estoy desde que volví al ortodoncista para recoger mis primeras férulas de refinamiento. ¿Lo recordáis?

Mi ortodoncia había llegado a su fin, pero así de sorpresa me comentaron que había algunos detalles que corregir, nimiedades seguramente, las cuales en pocas sesiones (eso ya lo supuso mi imaginación)
Serían corregidas. 

Antes de acudir a la consulta me extrañó que, cuando me llamaron para decirme que ya lo tenía todo preparado y preguntarme que cuándo iba a querer la cita, me advirtieran que ésta sería de al menos hora y media. ¿Tanto tiempo solo para entregarme unas férulas? Me empecé a mosquear.
Cuando llegó el momento de la consulta observé aterrada cómo me iban a volver a colocar los temidos ataches, aquellos que me quitaron la vez anterior y que erróneamente supuse extinguidos de mi vida.

Pero no eran los ataches de antes, ojalá, eran muchos más. Ataches por toda la boca, creo que estoy exagerando un poco pero había muchos, que vosotros os preguntaréis ¿y qué más te da si no molestan? Tenéis toda la razón ya que lo peor de los ataches es su colocación ¿Preparados?
Comienzan limándote muy bien la superficie del diente donde te lo van a colocar, te echan un líquido que no se para que sirve pero que sabe a rayos, lo dejan un rato para que haga efecto, te pegan el trozo de masilla en el diente, te colocan un trozo de férula correspondiente a ese diente y aprietan durante dos largos minutos.
Tras ese tiempo te quitan el trozo de férula mientras esperas que la masilla se haya quedado en el diente y no en el molde, sino habría que volver a empezar.
Y así con cada diente.

Afortunadamente todos menos uno salieron a la primera por lo que no pasé la tarde entera en la consulta, como si me ocurrió la primera vez que me los colocaron allá por Junio, así que llegó el momento de entregarme las nuevas fundas. ¿28? ¿Por qué tantas fundas si esto sólo va a durar dos meses? Porque son dos meses ¿verdad?
Ay qué ilusa soy a veces…

Resumiendo, tengo para rato con el refinamiento así que sólo me queda rezar todo lo que sepa para que esta vez todo salga bien y no decidan que necesito más férulas. Eso sí, incluido en el presupuesto inicial porque pagar para sufrir yo no pago más.

¡Gracias por leerme!